Es importante mantener nuestro sistema inmunológico fuerte y sano.
Definitivamente, el lavado de manos y el “distanciamiento social” ayudan a frenar la propagación. Sin embargo, no es suficiente.
En caso de exposición, es necesario proteger a nuestras células, ayudándoles a que el virus no entre a ellas.
Esta protección no se logra con antibióticos, ni medicamentos, ni analgésicos. Solo se logra con un antiviral.
La Spirulina, adicional a que es un súper alimento, tiene la “fuerza natural” de ser un antiviral.
• Ofrece a tus células alto nivel nutricional, así tu familia y tú, estarán nutridos a nivel vitamínico, proteico y mineral.
• Hace la función de un escudo, de un blindaje para que, -en caso de que te contagies del coronavirus-, no entre a tus células.
Lo explicamos en 3 pasos:
1) Sus proteínas “en forma de aguja”, ayudan al coronavirus a abrirse paso al interior de nuestras células.
2) Una vez dentro, el coronavirus libera un fragmento de su material genético y así, la maquinaria de la célula comienza a producir nuevas agujas y otras proteínas que formarán más copias del coronavirus.
3) Cada célula infectada puede liberar millones de copias del virus, infectando a las células cercanas o terminar en gotas que escapan de los pulmones, que podían infectar a otras personas.